Seguro que a más de uno le ha pasado por la cabeza lo mismo que a mi: “Anda que no molaría hacer los mapas de juego y proyectarlos sobre la mesa para que todos lo viesen”.
La idea es genial, sí, sobre todo si dispones de 400€ para comprarte un proyector.
A pesar de que el precio es astronómico para el ocio, nunca he llegado a descartar esta idea, pero otro motivo que me hace pensármelo más es: ¿Dónde coño proyecto yo? Lo ideal es colocarlo sobre la mesa y proyectar contra esta, pero eso requiere tener un soporte en el techo del cual casi nadie dispone, y si no vives en una casa enteramente de tu propiedad, no podrás poner.
Esta idea es por tanto factible únicamente para asociaciones y organizaciones de rol, quedando para los jugadores no organizados como algo idílico a lo que jamás podremos llegar.
Pero para aquellos que puedan permitírselo por un motivo u otro, considero esta adquisición como muy buena, pero ha de combinarse al menos con un portátil de master para que pueda gestionar el proyector.
Aun así, para que quede bonito, se requiere o bien una licencia de software para usar algunas herramientas dedicadas a esto o bien tener un control sumo en el diseño gráfico y ser capaz de crear tus propios escenarios y representaciones de personajes.
Y lo malo como ya dije, es el precio, he estado mirando y el proyector más barato que he visto costaba 309 €, siendo el siguiente ya casi por 400 €. Un lujo que pocos se pueden permitir.
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